El impacto del embarazo adolescente en los familiares

Muchas veces se habla del impacto que tiene el embarazo adolescente en los jóvenes, sin embargo pocas veces se abre un espacio para hablar de lo que viven los familiares de estos jóvenes. Por esta razón hemos decidido dedicar este artículo a los familiares basándonos en nuestra experiencia mediante el Programa de Facilitación de Apego Madre Infante desarrollado por la Fundacion Relaciones Sanas.

Durante el embarazo adolescente se vive una doble crisis, ya que las jóvenes involucradas no solo atraviesan los cambios hormonales, emocionales, físicos y psicológicos característicos de la adolescencia; además se le agregan todas las ansiedades, preocupaciones y cambios hormonales que acompañan el primer embarazo. Adicionalmente, se experimentan sentimientos de vergüenza, culpa e incertidumbre hacia el futuro, junto con la sensación de haber defraudado a sus padres y familiares. En esta circunstancia afloran conflictos que terminan aislando a los jóvenes de sus familiares en un momento en el que más necesitan sentir el acompañamiento y la guía. Mientras las adolescentes que viven un embarazo no reciban el apoyo de sus familiares, les será más difícil aceptarlo, expresar sentimientos positivos hacia esta experiencia e incluso pudieran terminar cometiendo actos que perjudican la salud física y emocional del bebé en camino.

La falta de apoyo de los familiares de los jóvenes que atraviesan un embarazo adolescente puede estar relacionada a muchos factores. En ocasiones el impacto de la noticia es tan fuerte que llega a afectar la salud de los futuros abuelos o crea conflictos de lealtad entre estos porque  una de las partes desea apoyar a los futuros padres y la otra no. De hecho, se ha podido observar que los familiares atraviesan por un proceso de duelo hacia la aceptación de la situación:

  • Impacto ante la noticia y dificultad para creer que es real.
  • Rabia hacia la joven embarazada o hacia el joven que la embarazó, lo que hace que los castiguen, los saquen de la casa o les quiten el habla. Incluso los familiares realizan demandas legales a los padres del menor con el fin de buscar su apoyo cuando no ocurre un acercamiento mutuo con el objetivo de ayudar a los jóvenes en la crisis que están viviendo.
  • Dolor por la situación que están pasando sus hijos. Los invade un sentimiento de culpa porque sienten que han fallado como padres y les da tristeza que sus hijos se encuentren frente a una situación que pone en peligro su superación a nivel educativo y personal.
  • Aceptación de la situación. En algunos casos después de un tiempo y de procesar la realidad, los familiares se llenan de esperanza y apoyan a los jóvenes y los incentivan a seguir con sus estudios. En nuestros grupos de trabajo con los familiares, hemos podido observar cómo, los abuelos del bebé que viene en camino, cuando tienen un espacio para desahogarse, van tranquilizándose y apoyando a sus hijos.

Diversos estudios han comprobado que existe una tendencia inconsciente muy fuerte en el ser humano de repetir la historia de sus padres. Por esta razón hemos podido observar que muchos de los jóvenes que viven un embarazo adolescente fueron ellos mismos bebés de padres adolescentes. Esto hace que los futuros abuelos del bebé revivan una parte dolorosa de su historia, lo que en ocasiones bloquea su propia capacidad para apoyarlos. Otras veces, el embarazo adolescente se da en momentos en que la familia atraviesa alguna crisis como muerte de un ser querido, divorcio, dificultades económicas, discusiones familiares, intensificandose el conflicto.

Una situación común que hemos observado es que, debido a que los adolescentes dudan de su capacidad para cuidar al bebé que está por nacer, muchas veces los abuelos terminan criando a los nietos. Queremos resaltar que es muy importante el apoyo que los abuelos brinden a sus hijos sirviendo de guía, pero a la vez deben permitir que la mamá y el papá realicen su rol de padres. Un bebé necesita a sus cuidadores primarios, que son las primeras personas con las que ha tenido contacto. Es cierto que la figura de los abuelos es muy importante, sin embargo no remplaza la figura de los padres. Un bebé necesita a sus padres independientemente de la experiencia que estos tengan y no cabe duda de que ser papá y mamá se aprende con la experiencia.

De la misma manera, muchas veces se excluye la figura del padre. El rol del padre es tan importante como el rol de la madre. Ambos tienen funciones diferentes en el desarrollo del bebé, pero la ausencia de cualquiera de los dos deja cicatrices en la vida de un individuo. Aunque los padres del bebé ya no estén juntos como pareja, es importante que se permita que el padre participe en la crianza del bebé. La única circunstancia donde esto no aplica es cuando la seguridad de alguno de los involucrados está en riesgo.

Cuando los abuelos realizan todo el trabajo o cuando se excluye la figura del padre, no solo les quita la oportunidad a los padres de disfrutar a sus hijos, también se les quita la oportunidad a los bebés de gozar de una relación fundamental para su salud emocional.

Con este artículo queremos resaltar a los familiares de los adolescentes que viven un embarazo lo fundamental que es formar una red de apoyo. Esta situación no es fácil ni para los adolescentes ni para sus padres. Si buscan fortaleza en familiares, amigos, psicólogos en centros de salud o clínicas privadas, van a aumentar su capacidad de apoyar y cuidar a sus hijos cuando atraviesan este conflicto. Es muy difícil apoyar a otra persona cuando uno mismo no se siente bien. Esto creará una cadena sana, ya que los adolescentes necesitan del apoyo de sus padres para poder tener la capacidad de cuidar a los bebés que traen al mundo. Esto quiere decir que si los familiares buscan apoyo, impactarán de una manera positiva la vida de sus nietos, quienes sin duda (aunque sea difícil de imaginar en estos momentos) formarán parte de las personas más importantes de sus vidas en un futuro.

Mgter. Andrea V. Jara

Mgter. María Angela Tulipano