Estigma de la salud mental en los hombres

Escrito por: Kyo-sai Nieves, Psicóloga (@psi.kyosainieves)

La salud mental es un tema que nos incumbe a todos sin distinción de raza, cultura o sexo (genero).  A través de la crianza en latinoamericana, se ha inculcado que el hombre no debe mostrar sus emociones, ni sentimientos como la tristeza ya que, esta es vista como demostración de “debilidad” y “falta de carácter”. Por el contrario, a la mujer se le permite abrir espacios para hablar de lo que siente, contando con más herramientas para manejar alguna dolencia o buscar ayuda.

Más de una vez hemos escuchado comentarios como: “Los niños no lloran”, “pareces una mujercita” o “compórtate como un varón” entre otras. Al utilizar estas frases se invalida la emoción de la persona y en ocasiones puede evocar vergüenza y evitar buscar ayuda por el que dirán de “mí”.

 Según la Organización Panamericana de la Salud, en nuestro continente, un aproximado de 100,000 personas mueren por suicidio cada año y al nivel mundial 79% son hombres. Esto se debe a que, existen muchos estereotipos alrededor de cómo debería ser un hombre, por ejemplo: autosuficiente, valerse por sí mismos y saber lidiar con cualquier dificultad que se le presente sin pedir ayuda. El hombre se conecta con la ira, frustración y hostilidad de esta manera que pueden lidiar lo que están sintiendo.

Al no tener el espacio para expresar lo que realmente sienten, van cargando con el malestar emocional por tiempo prologado, se vuele cada día más pesado, sin entender lo que siente, al tal punto de no poder soportarlo y sentir que no hay salida. 

Como amigos (as), compañeros (as) o seres queridos, es importante poder estar atento de señales de alerta y tener las herramientas para poder acompañar a esta persona que lo puede estar necesitando, una pregunta hace la diferencia como: ¿Estas bien?

Las señales que nos guiaran a identificar cuando activar la escucha activa

Aunque los síntomas y signos de algunos padecimientos de la salud mental como: ansiedad, depresión, etc. son los mismos entre hombres y mujeres. Sin embargo, en el hombre se ha podido observar algunas leves variaciones.

  • Sentimiento de inquietud
  • Perdida de interés como el trabajo, la familia o pasatiempos
  • Irritabilidad o agresividad
  • Malestar físico como: dolor de cabeza, problemas digestivos.
  • Participación de actividades de alto riesgo
  • Consumo de alcohol o drogas
  • Problemas con la libido (deseo sexual) 
  • No poder dormir o dormir en exceso 
  • Aislarse de amigos y familiares
  • Comer mucho o no querer comer
  • Estado ansioso
  • Desesperanza
  • No entender lo que le está sucediendo

¿Cómo activar mi escucha activa?

La escucha activa es la habilidad de poder escuchar a la persona en el momento presente, prestar atención en lo que expresa, sus emociones, sus ideas y pensamientos. Validar sus emociones, haciéndole saber que estamos allí para él y estamos dispuesto a ofrecerle nuestra ayuda.

  1. Abrir espacios para expresar lo que se está sintiendo
  2. Escuchemos sin valor de juicio
  3. Validemos la emoción y experiencia contada
  4. Agradezcamos la confianza de poder contar algo tan difícil para él. 
  5. Ofrecer ayuda en la búsqueda de un profesional de la salud mental.

¿Estás listo (a) para activar la escucha activa? Atrévete hacer la pregunta. Tal vez esa pregunta puede salvar una vida o dejar una semilla para que pueda crecer la posibilidad de hablar y buscar ayuda. No estás solo, te dejaremos las líneas de atención gratuitas para cuando lo necesites.