‘Viento en Popa’ con Responsabilidad Afectiva

Por Emilia Smith V., Psicóloga

Al pensar sobre la responsabilidad afectiva, es un concepto propuesto por la psicóloga clínica Deborah Anapol, en su libro sobre el poliamor. Posteriormente, acoge popularidad al ser adoptado por el feminismo, invitando a pensar sobre la equidad de género dentro de las relaciones afectivas y la deconstrucción del “amor romántico”. ¿Cómo nos atañe? 

Las relaciones primarias y las experiencias tempranas, definen el marco de patrones de apego. De esta manera, se van estructurando modelos de comportamientos con los cuales nos conectaremos al mundo tomando diferentes acciones que nos acercarán o alejarán del otro. Decía el filósofo y Santo Agustín, “la medida del amor es amar sin medidas”, ¿será cierto?

Ante la incertidumbre, impresiona que navegamos en un mar de dudas con tremendas olas que nos distancian de relacionarnos mediante el diálogo, la empatía, el respeto por los límites propios y ajenos. Para refugiarnos en la <<nada>> de la posesividad y la inseguridad que nos incita a medir constantemente aquello que entregamos y recibimos. Aun así, ¿podemos reducir al amor exclusivamente a una transacción emocional entre personas?

Confundidos entre el temor a la soledad y la necesidad de preservar nuestro bienestar emocional, nuestra brújula emocional podrá oscilar ente el control y la indefensión, el rencor y el perdón, el enojo y la calma, la frustración y la comprensión. Grandes conflictos difíciles de tolerar, pero necesarios de encarar, sin dejar a un lado los inevitables sentimientos ajenos.

Al aprender sobre la responsabilidad afectiva y lo que implica, resulta fundamental evitar el juicio y abrazar el deseo por desarrollar relaciones más sanas. Entendiendo que cada uno se embarca a una relación -amistad, laboral y de pareja- con su propio bagaje de experiencias y con una mochila emocional no necesariamente equipada de acuerdo a nuestras expectativas.

¿Qué coordenadas podemos considerar para navegar integrando la responsabilidad afectiva?

  • Reconocer tus propios sentimientos ante la situación.
  • Escuchar y comprender los sentimientos y pensamientos del otro.
  • Diferenciar entre aquello que puedes controlar y lo que no.
  • Responder a la situación de acuerdo a la consciencia que ahora se tiene.