El Rol del Arte en la Vida Emocional de los Niños

Escrito por: Beatriz Martinez, Psicóloga Clínica de Niños y Educadora Y Maria Carolina Carrizo, Educadora y Terapeuta Artística 

¿Sabías que el lenguaje natural de los niños es el juego y el dibujo? Es a través de estos que los niños pueden expresar sus emociones, miedos, preguntas y preocupaciones. Mucho antes de que la parte verbal esté del todo desarrollada, los niños ya juegan y dibujan. 

Es por esto que estas son herramientas tan importantes en la terapia con niños. El arte de los niños sirve como un canal de expresión: a través de él los niños pueden poner afuera sus pensamientos, inquietudes y sentimientos; aun antes de poder expresarlos verbalmente. 

No solo es valioso en la expresión emocional. El arte es un medio que ayuda a los niños a entender e identificar las emociones, a ponerles nombre y a manejarlas de formas apropiadas y sanas. 

El arte y su impacto en la salud emocional

Cuando hablamos del valor del arte en la vida emocional de los niños, no nos referimos a aprender técnica artística. Esto también es valioso y estimula una serie de habilidades importantes en los niños. En este caso, nos referimos a utilizar el arte como un medio de expresión saludable, a ir más allá de lo que es considerado ‘estético’ o ‘agradable’ a la vista y utilizar el arte para elaborar el mundo interno de los niños. 

Muchos de los grandes artistas que hoy conocemos, no creaban con el objetivo de hacer algo agradable a la vista, lo hacían con el objetivo de expresarse, de poner afuera pensamientos y sentimientos difíciles y elaborarlos de alguna forma. Este es el valor de la expresión artística en la vida emocional – poder poner afuera aquellos que quizás no entendemos o nos causa algún tipo de malestar. 

Sabiendo esto, ¿de qué formas podemos apoyar a los niños a expresarse a través del arte? 

Aquí te incluimos algunas recomendaciones: 

  • Ofrecer un espacio donde puedan crear: Designar un espacio en casa donde el niño pueda crear libremente, con límites claros, sin preocupación de ensuciar o desordenar.
  • Ofrecer variedad de materiales y permitir al niño que elija: La elección y el interés es clave en la expresión artística. Recomendamos ofrecer a los niños más que solo pintura y pinceles: plumas, algodón, crema de afeitar, distintas texturas, materiales comunes de casa o reciclados, son algunos de los materiales que podemos ofrecer.
  • Utilizar un lenguaje que promueva la expresión artística: En vez de comentar sobre si el arte del niño es ‘bonito’, aportar con comentarios como: “Cuéntame, ¿cómo fue tu proceso?” “¿Que tenías en mente cuando hiciste esto?” “¿A que te recuerda esto?” “¿Como lo hiciste?”
  • No presionar al niño a hablar de su arte si no quiere o no está listo: Corremos el riesgo de lograr el efecto contrario. 
  • No ofrecer recomendaciones de cómo debería hacer algo: Recordemos que en este caso, el arte se usa como medio de expresión. Muchas veces el niño deja de hacer arte porque se empieza a comparar con otros. 
  • Ofrecer un espacio donde el arte del niño es recibido sin juicios: En ocasiones, el contenido del arte de los niños pueden preocuparnos. “¿Por qué hizo eso? ¿Que quiere decir?” El arte de los niños no siempre es literal. El arte ofrece un medio en el cual pueden elaborar algo que sucedió, pero también pueden darle un final diferente a una situación que vivieron, o pueden usar el arte para poner el enojo o la agresividad afuera de formas apropiadas.
  • Observar y estar preparado para ofrecer contención si es necesario: Algunos niños pueden sentir frustración cuando todavía piensan que su arte tiene que agradar a otros o cuando son autocríticos con sus creaciones. El rol del adulto debe ser de acompañamiento y contención si es necesario. “Esta bien si no te salió como planeabas.” “Puedes intentar otras cosas.” “¿Qué cambios podrías hacerle?” 
  • No comentar sobre la parte estética:Que lindo está tu dibujo.” “Me encanta.” Recordemos que el arte del niño no está hecho para agradar a otros ni tiene que cumplir con estándares estéticos.

Introducir a los niños al mundo de la expresión artística es como darles la llave para empezar a descifrar, identificar, entender y elaborar sus emociones de forma saludable. Es una herramienta que puede acompañarlos durante toda su vida y a la que pueden recurrir siempre que la necesiten. ¡La expresión artística sana y repara!