Mitos sobre los celos en la pareja.

1- Los celos son malos

Falso.  Es normal sentir celos.  De hecho, sentirlos puede recordarnos que nuestra pareja es importante y que valoramos nuestra relación con él/ella.  Los celos en sí no son malos, sino: la frecuencia con la que ocurren,  la manera en que actuamos cuando sentimos celos, cómo se lo comunicamos a nuestra pareja y cómo esta responde.  Definitivamente una relación se puede deteriorar cuando uno o ambos en la pareja sienten celos constantemente, y si esto los lleva a gritar, reclamar, cuestionar, revisar, prohibir y controlar al otro.

2 – Los celos son para gente insegura

Falso.   Cuando una persona siente celos es porque teme perder a su objeto de amor frente a un tercero que parece poseer cualidades que el primero desea. Estas cualidades deseadas se convierten en sus áreas de inseguridad.  Esto quiere decir que sentir celos de vez en cuando no implica que la persona sea insegura en su totalidad.  La diferencia está, de nuevo, en la frecuencia de este temor a la pérdida.  Entre más áreas de inseguridad tenga una persona, mayor es la frecuencia con la que se sentirá amenazado por otros.

3 – Los celos conducen a un comportamiento irracional o violento.

Falso.  Los celos en sí no producen un comportamiento irracional o violento, sino la manera en que decidimos actuar en relación a nuestros pensamientos y emociones.  Digamos que una persona ve a su pareja en una foto en las redes sociales abrazada a un atractivo desconocido.  Esta imagen le va a provocar una emoción y esta emoción le va a traer pensamientos. Justo después la persona puede tomar una acción.  Esto significa que hay un momento en el que esta persona puede detenerse a pensar en lo que va a hacer o decir.   Una opción saludable es preguntarle a su pareja por la foto y escuchar lo que tiene que decir antes de dejarse llevar por las conclusiones (seguramente negativas) que rápidamente se formaron en su mente.  Ahora, este proceso de frenarse y pensar antes de actuar  no es fácil.  Es recomendable que quienes tienen problemas en sus relaciones amorosas por esta impulsividad busquen ayuda psicológica, ya que existen razones específicas que los llevan a reaccionar de esta manera cuando se sienten amenazados.

4 – Revisar el celular, email o redes sociales de mi pareja está bien si sospecho que es infiel.

Falso.  Podrías pensar que como tu pareja no debe tener nada que esconder, entonces mirar lo que hay en su celular o email no debería ser un problema.  Pero la verdad es que ambos deberían confiar suficientemente en el otro como para no necesitar buscar información a espaldas de su pareja.  Revisar los dispositivos y redes sociales del otro es una falta a la privacidad que cada uno merece.  Si tienes dudas, puedes comunicarle tus inquietudes a tu pareja.

5 – Es un error compartirle a tu pareja que estas celoso(a).

Falso.  Como cualquier otra emoción, si los celos no se discuten, no desaparecen, sino que se acumulan, lo cual te puede llevar a tener cambios de humor, actuar hipersensible o tratar de controlar a tu pareja.  Por el contrario, hablar con él/ella  sobre tus celos te ayuda a enfocarte en tus sentimientos y no en el comportamiento de tu pareja; y aún más importante, evitas acumular sentimientos que provocan acciones y actitudes que crean más distancia o desconfianza en tu relación.  Hablar con tu pareja sobre tus emociones puede hacerte sentir que estas más cerca de él/ella y tal vez puedas escuchar la seguridad y confort que necesitas de parte de él/ella.

6 – Debo molestarme si mi pareja me dice que esta celoso porque significa que no confía en mí.

Falso.  Es natural que te molestes o te alejes un poco de tu pareja si esta siente celos que lo/la llevan a querer controlarte, manipularte o invadir tu privacidad.  Pero este distanciamiento o evasión puede hacer que el problema empeore.  La mejor opción para manejar los celos de tu pareja es tratando de entender sus miedos o  ansiedades y de validar sus sentimientos.  Evita frases como “otra vez con lo mismo!”, o “estás loco(a)!”, “y ahora de donde salió esto?”, por ejemplo.  Estas frases pueden hacer que la conversación se escale.  Muéstrate dispuesto(a) a escuchar lo que tu pareja tiene que decir y dale la seguridad que necesita.

7 – Si siento celos debo hacerle lo mismo a mi pareja.

Falso.  Es lo mismo que pegar de vuelta cuando te pegan: Lo que sucede es que el golpe te dolió, y de una manera impulsiva, tratas de defenderte causándole  el mismo tipo de daño al otro.  Lo que hay en el fondo es dolor, pero como muchas veces es muy difícil dejarse sentir vulnerable, entonces salen las defensas a proteger la imagen del afectado.  Al final, provocar celos como venganza alarga el ciclo del problema causando más heridas.  Hacerle lo mismo al otro también es una manifestación de no saber poner tus necesidades, límites y sentimientos en palabras. Mejor practica la asertividad para comunicarte con tu pareja y para ser honesto contigo mismo, aceptando tus debilidades y la importancia que le das a tu pareja.

8 – Mi pareja no debe hablar, chatear o hacer amistad con personas del sexo opuesto.

Falso.   En una relación saludable, ambos miembros deben sentirse libres de relacionarse con otras personas, sin importar el sexo.  Sentirse amenazado por cualquier persona del sexo opuesto es más un conflicto emocional de quien cela, que un problema en el comportamiento de la pareja.

9 – Debo esconderle detalles o hechos a mi pareja para que no sienta celos.

Falso.  Es normal querer esconder detalles cuando sabes que tu pareja no maneja bien la verdad, pero en realidad esto empeora la situación porque aumenta la ansiedad, la sospecha y los celos de la pareja.  Así como recomendamos decirle siempre la verdad a los niños cuando te tienes que ir para el trabajo y que vas a demorar, aunque se ponga a llorar mucho, esto es mejor que salirse a escondidas:  el niño aprenderá a confiar en ti porque aunque no le guste que te vayas, le estas ofreciendo transparencia y además, él/ella notará que siempre regresas.  De la misma manera, tu pareja tiene derecho a sentir que eres honesto(a), y tú, a ser libre.

10 – Como mi pareja ha sido infiel en el pasado ya no debo confiar en él/ella.

Falso.  Volver a confiar en una pareja que te ha engañado en el pasado es muy difícil: quieres creer todo lo que te dice, pero no sabes si te está diciendo la verdad.  La desconfianza deteriora relaciones porque mantiene latentes la rabia, el miedo y actitudes defensivas. Es importante que ambos miembros de la pareja determinen si desean continuar la relación, y de ser así, deben buscar ayuda profesional para resolver los conflictos de raíz para que no se vuelvan a repetir.